Sinan – Hoy volvemos a madrugar, los niños siguen durmiendo. Hacemos las maletas y dejamos Charleston SC. Tenemos un largo camino hasta Florida de nuevo. Sin embargo, nuestra vida cotidiana es muy diferente a la de Viena. En este momento viajamos de un lugar a otro y nos movemos de forma bastante espontánea. Sin embargo, siempre hay mucho que organizar, un esfuerzo que no disminuye. Seguimos buscando un ritmo adecuado para todos e intentamos disfrutar del tiempo y dominar los retos: repartir mejor la organización, reinventarnos, reconstruir la vida cotidiana. Que no siempre tiene éxito. Pero estamos bien encaminados. Especialmente hoy temprano. Emocionado por lo que nos espera a todos. Florida nos sorprende con una lluvia tropical, y parece incesante. Sin embargo, llegamos a la luz al final del túnel y tenemos algo de tiempo para exhalar. Alivio, con la esperanza de que la próxima vez nos depare hermosas aventuras y de que nos enfrentemos mejor a todo. Para mí, no hay nostalgia, sólo el anhelo de una nueva serenidad que se encuentra en el viaje.